La realidad y nuestra realidad.

1.- Entender la diferencia entre la realidad y nuestra realidad.

2.- Saber qué hacer.

Diferencia entre realidad y nuestra realidad.

¿Qué es la realidad?

El diccionario define realidad como lo verdadero, lo que ocurre verdaderamente y cuando hablamos de lo que percibimos con nuestros cinco sentidos, de lo que existe, hablamos de la realidad.

Estamos convencidos de que lo que sucede a nuestro alrededor y nosotros vemos, oímos, etc., es "la verdad".
Pero esto no es así.

Nuestra percepción de la realidad no es idéntica a la realidad, no es una fotografía fiel, aunque nosotros así lo creemos y esta es la razón de muchos de nuestros conflictos con otras personas y de nuestros errores al tomar decisiones equivocadas o al actuar inadecuadamente.

¿Te ha sucedido que dos personas estás en la misma situación y cada una de ellas describe algo completamente diferente?
¿Crees que una de ellas o las dos, están mintiendo?

No, lo que sucede es que cada una de ellas percibe, organiza e interpreta la información de una manera distinta.

Para poder vivir, alimentarnos, protegernos, relacionarnos con la gente, etc., necesitamos interactuar con el medio ambiente y para ellos, necesitamos conocerlo.
Para poder hacerlo, todo el tiempo estamos recibiendo información a través de nuestros sentidos, que nos van diciendo como está formado el medio en el que nos encontramos y los cambios que se dan en él.

Sin embargo, a pesar de la rapidez con la que trabaja nuestro cerebro, sería imposible recibir, analizar e integrar tanta información, por lo que nuestro organismo está capacitado para seleccionar e interpretar lo que realmente necesitamos, aunque no nos damos cuenta de que lo estamos haciendo.

¿Te has sucedido que en una película alguien ve un objeto, un animal o nota ciertas características en una persona que tú no viste?
¿Has buscado algo que no encuentras y otra persona que entra al cuarto lo ve inmediatamente, porque está a la vista?
Esto se debe a que nuestro cerebro selecciona a qué le presta atención.

Toda la información que está frente a nosotros y que vamos a recibir, analizar, integrar, organizar e interpretar, para formar nuestra realidad, es seleccionada y una gran parte es rechazada.
La que es aceptada, pasa por una serie de "filtros" formados por nuestras emociones, experiencias previas, generalizaciones aprendidas, expectativas, valores, etc.

Por ejemplo:
Si nosotros pensamos que cierta persona siempre está enojada, cada vez que la veamos, la vamos a ver enojada, aunque simplemente esté cansada, pensativa, triste o preocupada.
Si aprendimos que la gente de determinado lugar es déspota y autoritaria, siempre que los escuchemos, vamos a oír que su tono de voz es así, aunque otras personas escuchen un tono de voz diferente.

Dos personas pueden llegar a un mismo lugar y una, encontrar las manchas en el tapete o en la pared (aunque sea una sola, pequeña), el lugar en donde los muebles están rallados (que casi no se nota) o los adornos no están bien y la otra va a encontrar lo bonito del colorido (aunque el lugar esté desordenado o sucio), un cuadro hermoso, un adorno interesante, etc.

Por eso una misma situación puede ser vista por una persona como terrible, llena de obstáculos y problemas y otra puede considerarla como simplemente con algunas dificultades.

Esto es importante, porque finalmente, todas las decisiones, emociones, conductas, etc., están relacionadas con las interpretaciones que hacemos de la realidad.

Cuando estamos conscientes de que nuestra realidad es subjetiva y estamos abiertos a escuchar y aceptar otros puntos de vista, no tenemos grandes problemas.

Las dificultades surgen cuando nos aferramos a pensar que nuestra realidad, es la realidad.
Cuando pensamos así:

• No aceptamos el punto de vista de otras personas y tenemos conflictos con ellas, sobre todo si ellas también piensan que su realidad es la verdad.
• Cometemos los mismos errores una y otra ves, sin darnos cuenta de donde está el problema.

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