Hola.
Tengo una nueva imagen para ustedes, pero el material va a seguir siendo el de siempre y constantemente va a aumentar y a mejorar.
De momento, vamos a tener algunos problemas con el formato, por lo que te pido una disculpa, pero estoy trabajando en ello.
Si deseas hacerme algún comentario, escríbeme, por favor a: [email protected]
Muchas gracias.
Silvia
Cómo tratar con gente difícil.
No es fácil saber cómo tratar con gente difícil, pero es importante aprender a hacerlo, porque siempre vamos a encontrar personas difíciles con quienes tengamos que relacionarnos.
¿Personas difíciles, amargan tu vida?
No lo permitas, aprende a tratarlas.
"Siempre que tengas un conflicto con alguien, existe un elemento que puede hacer la diferencia entre dañar la relación o profundizarla. Este elemento es, la actitud".
William James (Filósofo y psicólogo americano). |
¿Quién es una persona difícil?
Decimos que una persona es difícil, cuando:
- No sabemos como tratar con ella,
- no podemos manejarla,
- no hace lo que nosotros queremos que haga o
- demanda demasiado de nosotros.
Generalmente, una persona difícil quiere ser siempre la que manda, logre que las cosas se hagan a su manera, diga la última palabra o demuestre que es la que tiene la razón.
La mayor parte de las veces, aunque no lo exprese ni lo acepte, es egocéntrica e insegura.
Cuando tratas con personas difíciles, necesitas saber con quien tratas (qué motiva el comportamiento de la persona), que quieres lograr y para que lo quieres lograr, cuanto vas a arriesgar de la relación y si vale la pena el desgaste tuyo y de la relación.
Las personas pueden ser difíciles:
- Sin darse cuenta de que lo son, ya sea porque:
No pueden manejar adecuadamente sus emociones negativas (estrés, frustración, enojo, etc.), y se desquitan con los demás.
Están tan inmersos en sí mismos, que no perciben las necesidades y la forma de pensar de los demás, dando por hecho que todos piensan o deberían de pensar como ellos y necesitan lo que ellos quieren.
Tienen algunas características que influyen en su conducta, como arrogancia, terquedad, hostilidad, demasiada susceptibilidad, etc. siempre están convencidas de que tienen la razón, aun cuando están equivocadas,
Están manejados por algunas creencias equivocadas, que rigen su vida.
Creencias como:
"En la vida sólo hay vencedores y vencidos", por lo que ellos no pueden ceder y convertirse en vencidos, o
"Ceder es mostrarse débil y la gente se aprovecha de las personas débiles".
- Porque de esa manera consiguen lo que quieren.
¿Cómo actuar ante las personas difíciles?
Cuando nos relacionamos con personas difíciles, tenemos tres opciones:
- Aceptar la situación y a la persona, sin esperar que cambie.
Podemos negociar ciertos aspectos con ella, tratar de llegar a ciertos acuerdos, pero nosotros nunca, nunca, vamos a cambiar a otra persona.
La otra persona va a cambiar, sólo cuando ella esté convencida de que necesita cambiar y esté dispuesta, a hacer el esfuerzo necesario para lograrlo.
- Tratar de cambiar la relación, cambiando nuestra actitud y manera de pensar, respecto a la persona y a la relación.
Cuando entendemos el punto de vista de la otra persona, podemos:
Bajar nuestras expectativas respecto a ella, comprender los verdaderos motivos por los que actúa como lo hace, reconocer nuestras propias emociones, detrás de nuestra conducta etc. Cuando tenemos una mayor comprensión de la otra persona y de nosotros mismos, nuestra actitud y nuestras emociones cambian y nuestra manera de relacionarnos con esa persona también cambia.
- Alejarnos de la situación y de la persona, si creemos que nos está dañando y nosotros no podemos cambiar nuestra actitud al respecto o nuestro cambio no es suficiente.
En ocasiones, independientemente del tipo de relación que sea, pareja, familia, amigos, trabajo, etc. e independientemente de que existan lazos de cariño o amor, hay relaciones que no pueden mantenerse sin que nos dañen y lo más sano es alejarse de ellas.
¿Qué puedes hacer?
- En primer lugar es importante distinguir si la persona difícil es la otra persona o eres tú.
Si tienes "problemas" con mucha gente o una gran parte de la gente con la que tratas es difícil, probablemente el difícil eres tú y tú eres el que tiene que trabajar, para cambiar.
En ese caso, revisa la lista de por qué las personas pueden ser difíciles y trabaja sobre los aspectos relacionados contigo.
De preferencia hazlo con un psicólogo que te ayude.
Si tú no eres la persona difícil, es necesario que aceptes que nunca vas a poder tener una muy buena relación con una persona difícil.
Pero puedes aprender a manejarla mejor de lo que lo has hecho hasta ahora.
Recuerda que no puedes cambiarla ni controlarla, pero puedes controlarte a ti.
- No te involucres emocionalmente con sus problemas o emociones.
Si son personas que con frecuencia están enojados, estresados, gritan, etc., el problema es de ellos, no tuyo.
No es fácil desligarse emocionalmente de su respuesta, pero puedes aprender a hacerlo, poco a poco.
- Conoce a las personas con las que tratas.
Aun las personas difíciles tienen momentos o formas en las que se puede hablar con ellas.
¿Es más fácil pedirle algo que ordenarle?
¿Es mejor planear juntos y consultarlo que decirle las cosas cuando son un hecho?
Mucha gente necesita sentirse tomada en cuenta y hablar en plural "vamos a " en lugar de ordenar, puede hacer una gran diferencia.
Ve si esa persona se relaciona mejor con alguien más y a que se debe.
Cómo es esa relación y qué puedes aprender de ella.
- Cuida tu lenguaje corporal.
Con frecuencia, no nos damos cuenta y, aunque nuestras palabras sean amables, el tono o nuestros gestos son agresivos.
No seas sarcástico, no te burles, no adoptes una actitud paternalista, etc.
La gente reacciona con mayor fuerza ante el lenguaje corporal, que ante las palabras.
- Tómate un "tiempo fuera" si es necesario.
No todos los momentos son adecuados para negociar y mucho menos para discutir.
Si necesitas tiempo para pensar o analizar la situación, pídeselo a la otra persona, explicándole el motivo.
Si te estás enojando, explícale que quieres dejar la discusión para después, porque quieres estar más calmado.
Pregúntale a la otra persona si le gustaría dejar la plática para después, para que ambos la analicen más detenidamente.
- Respeta a la persona, aun si no te agrada.
Nunca la critiques en público, ni la hagas quedar en ridículo.
No la ignores, ni la dejes con la palabra en la boca.
- Demuéstrale a la persona que la tomas en cuenta y que te preocupas por ella
Si ves que discutir con esa persona no te va a llevar en ese momento a ningún lado, no lo hagas.
No caigas en el juego de demostrar quien gana o quién tiene la razón.
Psic. Silvia Russek
Lic. En Psicología Clínica.
Especialidad en Terapia de Pareja.
Especialidad en Terapia Cognitivo Conductual.
Terapia por Internet, por videoconferencia.
Orientación y terapia: e-mail: [email protected]
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El camino al éxito, está formado por información, acción y perseverancia.
Cada paso, por pequeño que sea, te acerca a la meta.
Tú puedes lograrlo.
Silvia Russek.
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